El policarbonato, comúnmente utilizado en techumbres y revestimientos industriales, ha trascendido su aplicación inicial para convertirse en un material muy presente en una variedad de tipologías arquitectónicas. Su combinación de resistencia, liviandad, fácil instalación y capacidad para permitir el paso de luz natural lo han posicionado como una opción atractiva en proyectos de arquitectura residencial, educativa e incluso cultural. En viviendas, el policarbonato no solo contribuye a crear ambientes luminosos y confortables, sino que también permite jugar con la translucidez para generar espacios privados sin sacrificar la conexión visual con el exterior.
El Coliseo Romano es posiblemente el espacio versátil más emblemático del mundo. Aunque esta estructura no estaba destinada a actividades deportivas, albergó diversos eventos, desde los conocidos combates de gladiadores hasta representaciones teatrales y las dramáticas naumachia (batallas navales). Esto demuestra que el uso flexible del espacio ha sido relevante desde la antigüedad. Siglos más tarde, en el contexto del entorno construido y el desarrollo urbano en constante cambio, los establecimientos deportivos han evolucionado de manera similar, convirtiéndose en ejemplos destacados de espacios polivalentes.
Estos complejos deportivos han pasado de ser lugares altamente especializados a estructuras dinámicas y multifuncionales. Ya sea que alberguen importantes eventos internacionales como los Juegos Olímpicos y Paralímpicos o sirvan como lugares de reunión para comunidades locales, estos espacios logran un delicado equilibrio entre abordar las necesidades de deportes específicos y mantener la flexibilidad para acomodar una variedad de actividades. ¿Cómo coexisten y se interconectan estas diversas funciones? Este análisis explorará cómo las instalaciones deportivas se configuran como centros flexibles para otras disciplinas y actividades cotidianas.
https://www.archdaily.cl/cl/1020541/de-las-cascaras-de-madera-a-los-paneles-de-policarbonato-materiales-que-dan-forma-a-espacios-deportivos-flexiblesEnrique Tovar
Un muro Trombe es una característica pasiva de los edificios solares que mejora la eficiencia térmica. Posicionado en el lado que recibe el sol de una estructura, consiste en un muro hecho de materiales como ladrillo, piedra o concreto, y un panel de vidrio o lámina de policarbonato colocado a unos centímetros de distancia. La radiación solar penetra el vidrio durante las horas del día y calienta el muro de albañilería. Este muro luego libera lentamente el calor almacenado en el edificio durante las horas más frescas de la noche, manteniendo una temperatura interior más consistente sin necesidad de sistemas de calefacción activos.
La translucidez, en esencia, es una propiedad óptica que permite el paso total o parcial de la luz a través de los materiales, sin proporcionar una visión clara de los objetos detrás de ellos. A pesar de su aparente sencillez, esta propiedad presenta aplicaciones fascinantes en el ámbito arquitectónico, generando propuestas atractivas y potentes que juegan con la luz sin obstruir las visuales.
Tradicionalmente, las láminas de vidrio han sido el material simbólico asociado a la transparencia, comúnmente utilizado en la fabricación de puertas y ventanas. Sin embargo, los avances tecnológicos en la producción y la exploración de materiales innovadores han ampliado significativamente las oportunidades para aprovechar esta propiedad tanto en aplicaciones interiores como exteriores. Estos avances desafían las limitaciones preconcebidas y fomentan la creatividad en el desarrollo de propuestas arquitectónicas novedosas.
https://www.archdaily.cl/cl/1013606/materiales-translucidos-en-la-arquitectura-una-vision-a-traves-de-capasEnrique Tovar
Durante los últimos años, el uso de materiales translúcidos en la arquitectura brasileña ha sido una tendencia creciente. El vidrio laminado translúcido, el policarbonato y el acrílico son sólo algunos de ellos. Si bien cuentan con diferentes ventajas y desventajas en relación al costo, la resistencia al impacto, el aislamiento térmico y acústico, lo que los une es su condición de brindar un diálogo constante entre el interior y el exterior.
Ya sea mezclándose o destacándose, encarnando transparencia o solidez, expresando tosquedad o suavidad, una fachada es el medio a través del cual nos relacionamos con la arquitectura. Cuenta una historia y, a menudo, puede marcar la pauta para el resto del interior. Pero además de definir una experiencia puramente visual, la envolvente de un edificio también debe ser práctica, duradera y tener la capacidad de gestionar adecuadamente las necesidades de iluminación y ventilación natural.
Al fin y al cabo, al ser el punto de contacto con el exterior, es responsable de mitigar los sonidos y brindar protección contra las condiciones climáticas, como el viento, la lluvia, el calor y la humedad. Por lo tanto, al diseñar una fachada, es importante tener en cuenta un equilibrio entre el rendimiento y una estética hermosa. Por supuesto, muchos materiales cumplen con éxito estos criterios. Pero cuando se trata de crear un ambiente reconfortante, lleno de luz y al mismo tiempo garantizar resistencia, facilidad de instalación y versatilidad, las propiedades de los paneles de policarbonato translúcido parecen no tener comparación.
El policarbonato se ha convertido en una opción interesante en reemplazo del vidrio en las fachadas, ya que presenta distintos niveles de translucidez y entrega una óptima transmisión y difusión de la luz. Además, es un material ligero, flexible, reciclable, duradero, resistente a impactos y con protección UV, resistiendo temperaturas de entre los -40°C y los 115°C. Pero más allá de sus propiedades funcionales, este termoplástico entrega oportunidades estéticas, permitiendo crear fachadas dinámicas y expresivas.
Diversificar los materiales de un espacio interior puede mejorar en gran medida su profundidad e interés visual. Al mismo tiempo, agregar particiones u otras delimitaciones en el espacio interno puede ayudar a organizar sus flujos, la circulación y la visibilidad. El policarbonato, un tipo de termoplástico ligero y duradero, es un muy buen medio para ambas funciones.
En bruto, el policarbonato es completamente transparente y transmite luz con casi la misma eficacia que el vidrio. Sin embargo, también es más ligero y resistente que el vidrio, y más resistente que otros plásticos similares como el acrílico, poliestireno, ABS o nailon, por lo que es una buena opción para los diseñadores que buscan materiales duraderos, resistentes al impacto y al fuego que aún transmitan la luz. Al igual que el vidrio, es un filtro UV natural y se puede colorear o teñir para lograr translucidez, pero también es valorado por su flexibilidad, lo que le permite adoptar cualquier forma o tamaño. Finalmente, es fácilmente reciclable porque puede licuarse en lugar de quemarse, lo que lo hace al menos más ecológico que otros plásticos termoendurecibles. Por ejemplo, el policarbonato reciclado se puede hacer reaccionar químicamente con fenol en una planta de reciclaje, produciendo monómeros que se pueden convertir nuevamente en plástico.
https://www.archdaily.cl/cl/948078/policarbonato-en-interiores-8-ejemplos-de-arquitectura-translucida-puertas-adentroLilly Cao
Desde al menos la época romana antigua, los seres humanos han reconocido el valor de lo que ahora se conoce como agricultura de ambiente controlado, permitiendo a los agricultores cultivar plantas durante todo el año y no solo en ciertas estaciones. Aunque fueron inventados hace cientos de años, los invernaderos continúan siendo el medio más popular de agricultura de ambiente controlado en la actualidad, con innovaciones en tecnología y diseño que han mejorado tanto la belleza como la eficacia de esta tipología. A continuación, exploraremos en detalle la historia y la estructura del invernadero, así como varios ejemplos de diseño de invernaderos innovadores y experimentales.
https://www.archdaily.cl/cl/945829/estructura-y-revestimiento-translucido-como-disenar-un-invernaderoLilly Cao
Centro de Congressos e Auditório de Plasencia / Selgas Cano. ImageIwan Baan
Cada vez más, varios arquitectos han adoptado técnicas translúcidas en las fachadas de sus proyectos, ayudando en el control de la iluminación interior, ya que materiales como el policarbonato y el vidrio en U, por ejemplo, permiten que solo un porcentaje del nivel de luz permee la arquitectura. Por otro lado, al anochecer, estas materialidades promueven cualidades distintas con resultados sorprendentes, ya que cuando encienden sus luces, los edificios se convierten en verdaderas piezas de iluminación en la escena urbana.
Las fachadas translúcidas se componen de paneles "acristalados" ligeros que se utilizan en el exterior de los edificios, protegiendo la construcción del daño del clima, la humedad y la erosión. Su composición de microceldas de policarbonato entrega una luz suave y naturalmente difusa, integrando una amplia gama de colores, brillos y opacidades.
Al fijarlos en su lugar, a través de juntas ocultas, es posible ocultar elementos antiestéticos y ayudar a proteger a las personas de los dañinos rayos UV, asegurando también una máxima conducción térmica. Las personas que los utilizan notarán el ahorro energético al utilizar la luz natural para calentar e iluminar los espacios interiores, creando condiciones ambientales interiores muy atractivas para diferentes usos.
¿Cómo construir envolventes ligeras, con una confortable luz difusa y alta resistencia al impacto y al clima?
Compuesto de paneles de microcelda, el policarbonato ofrece diversas soluciones para el aprovechamiento de la iluminación natural en las envolventes arquitectónicas. Ya sea aplicado en fachadas, en espacios interiores o en cubiertas, las bondades del policarbonato como la ligereza, las líneas limpias, los paneles de colores y los efectos de luz, ofrecen una amplia libertad de diseño. La tecnología de paneles de microcelda reduce la necesidad de luz artificial y favorece la uniformidad en la difusión de la luz natural, logrando fachadas energéticamente eficientes y sensación de amplitud e iluminación en espacios interiores. Revisa, a continuación, 10 proyectos que han utilizado el policabonato como material envolvente.
La investigación de Kuan-Ting Lai, desarrollada en 'Sistemas Reconfigurables de Tensegridad', es una exploración de las capacidades del principio estructural en el desarrollo de estructuras variables en la arquitectura.
El proyecto, un prototipo de cilindros neumáticos y paneles de policarbonato, explora diferentes métodos de reconfiguración a partir de las reglas básicas de la tensegridad, evidenciando una potencialidad para brindar diferentes condiciones de iluminación o ventilación.
En Plataforma Arquitectura tenemos el agrado de darle la bienvenida a nuestro nuevo partner Nenzi, que formará parte importante de Materials, nuestro Catálogo de Productos de construcción y arquitectura.
Nenzi es una empresa Italiana con un prestigio de mas de 40 años en el mercado Europeo y llegamos a Chile con el objetivo de traer lo mejor de Italia a nuestros arquitectos.
“El derecho a la ciudad no es simplemente el derecho de acceso a lo que ya existe, sino el derecho a cambiarlo a partir de nuestros anhelos mas íntimos” –Robert Park, sociólogo urbano-
Arquitectura Expandida es un colectivo nómade que promueve la generación de lugares de encuentro en medio del territorio, desarrollando -desde 2010- una serie de proyectos en distintos barrios de Bogotá, Colombia. Funcionando como "Laboratorios Urbanos" transdisciplinares y experimentales, los edificios y espacios creados se han levantado de forma colaborativa y en estrecha relación con los habitantes de las comunidades favorecidas.
Dejamos con ustedes la Casa del Viento, una biblioteca construida de guadua, policarbonato y suelos de madera, que lleva consigo un mensaje bastante más potente que la liviandad y transparencia que amablemente proyecta.